LA CREACIÓN DE IMÁGENES RADIOFÓNICAS: TODO LO QUE LOGRA LA CREATIVIDAD
INTRODUCCIÓN
La creatividad en el siglo XXI es sinónimo de éxito. Esto
debido a que la originalidad y adaptación a un mundo globalizado será el plus
para el desarrollo social y personal en la evolución de representaciones. Los medios
de comunicación no son ajenos a esta transformación, saben que deben
actualizarse, cambiar y buscar las formas más llamativas y centradas posibles
para seguir conservando su popularidad.
La radio por su parte, ha aprendido a explorar la
creatividad y hacerla suya. Todo esto enfocado en la creación de imágenes radiofónicas
que permitirán su posicionamiento como el medio de comunicación más poderoso
del siglo.
DESARROLLO
La radio genera una situación comunicativa muy
particular, en la que emisor y receptor se ven sin ser vistos, se perciben
espacios que nunca antes se conocían y sobre la nada se dibujan auténticos
paisajes, montañas, animales, rostros, sonrisas, tristezas. Es que la radio,
como muchas veces se ha dicho, es un medio ciego, pero también es un mundo a
todo color que apela a la imaginación y provoca un torrente de imágenes, todo
para que el oyente quede seducido por quien le propone la escucha.
Este medio de comunicación, la radio, da pie a la
libre imaginación de la audiencia. Con un único sonido emitido, el radioescucha
logra crear un espacio en el que siente que vuela sobre la nube más alta del
cielo, o tal vez que ha vuelto en el tiempo hasta las antiguas luchas. Porque
no imaginarse al pie de la Torre Eiffel, o regresar hasta un bello baile de salón, de
esos a los que las mujeres asistían con vestido largos y voluptuosos peinados, con
una bella orquesta de jazz, candelabros…
Y es que la posibilidad de explotar nuestra
creatividad que nos proporciona la radio es infinita. No solo se limita a los
recursos que recibimos sino también a lo que hacemos con ellos al recibirlos,
generando posteriormente la formación de imágenes radiofónicos en el interior
de cada oyente.
La creatividad ha existido desde siempre, es una
habilidad del ser humano y, por lo tanto, vinculada a su propia naturaleza. Sin
embargo, por mucho tiempo, la creatividad como concepto fue un tema no abordado
y por lo mismo poco estudiado, es hasta años recientes donde surgen teóricos
que se abocan a profundizar sobre el tema y se desarrollan trabajos y
aportaciones alusivas a este concepto.
Para Drevdahl (1964), la creatividad supone:
“La capacidad humana de producir contenidos mentales
de cualquier tipo, que esencialmente puedan considerarse como nuevos y
desconocidos para quienes los producen”
“Creatividad: Definiciones, antecedentes y
aportaciones”, María Teresa Esquivias Serrano explica que la creatividad es:
“Un concepto que alude a uno de los procesos
cognitivos más sofisticado del ser humano, todo apunta a que se encuentra
influida por una amplia gama de experiencias evolutivas, sociales y educativas
y su manifestación es diversa en un sin número de campos.”
Si bien, la creatividad es propia de los seres
humanos, y la radio el medio más factible para ponerla en práctica, hoy en día
se atraviesa por un freno creativo radiofónico.
La radio actual ha olvidado la fórmula creativa de
presentación. Se cree que es mejor mantener un perfil medio que arriesgarse por
algo grande y llamativo. Hoy en día, los programa presentan formatos simples de
producciones básicas, si bien su planteamiento a tratar y lenguaje radiofónico
puede ser el indicado, se han olvidado de volver cómplice de lo que se
transmite al radioescucha.
Es por ello que hace tiempo, investigadores del medio
vienen denunciando la crisis creativa por la que atraviesa, una crisis que se
manifiesta en la inmovilidad de contenido y forma sonora.
Como nos dice Emma Rodero en “Recuperar la
creatividad radiofónica”:
“La creatividad, como capacidad de creación de nuevos
proyectos, se mantiene ligada siempre a la imaginación. De hecho, el DRAE
define este término precisamente como la facilidad para formar nuevas ideas,
nuevos proyectos”
Por lo cual, apostar siempre por lo conocido resulta
poco atractivo.
Enfoquémonos en la audiencia para saber hasta que
limite debemos acceder a nuestra creatividad. La audiencia es quien ayuda a
crear nuestra agenda y en el caso de las radionovelas, es está y su realidad a
la que estaremos apuntando. Saber con exactitud los gustos y preferencia de
nuestros futuros radioescuchas, apoyará al éxito del proyecto radiofónico, pero
también adicionará las piezas claves para lograr un espacio único y fuera del
formato habitual. Considerar estas particularidades en el momento de la
creación sumará puntos clave, para que se nos sea más realizable indagar en
nuestros pensamientos y orientar nuestra creatividad en marcha.
Si bien la creatividad no se limita, es necesario
saber cuándo decir basta. Ser creativo radiofónicamente, implica poder
transmitir el mensaje de manera eficiente, sensata y atractiva para la
audiencia, siempre enfocado en su cotidianidad.
La creatividad radiofónica es una característica
primordial en el equipo productivo. El grado de creatividad colocado en tu
trabajo reflejará la visión dimensional que tienes del mundo y cultura, y a la
vez el grado de compromiso para con tu proyecto.
A todo esto, definir la creatividad radiofónica resulta
con un grado de complejidad, y es que abarca todos los aspectos radiofónicos
existentes. Desde la voz de los talentos, el mensaje transmitido, los guiones
radiofónico, hasta llegar a la musicalidad y efectos sonoros que brindan el
ambiente de cercano y conocido en cualquier programa. Explorar en el mundo de
cada uno de estos recursos permitirá lograr un planteamiento original y propio
haciendo atractiva nuestra propuesta.
Ahora bien, si ya hemos dicho que la creatividad
radiofónica explora el mundo de la voz, pues será necesario hablar de ella.
Como la esencia propia y característica del ser
humano, la voz es la principal herramienta para la transmisión de mensajes,
permitiendo lograrse una comunicación. En grandes fragmentos, la voz humana es la columna
vertebral del sonido radiofónico.
Como lo expone Alonso Gonzáles en el segundo capítulo
de “El proceso creativo de la elaboración”:
“La voz transmite la idea. Constituye el conjunto de
elementos del lenguaje verbal, que utilizan los individuos para comunicarse
entre sí. Pero también potencia la imaginación del oyente… El lenguaje verbal
se fundamenta en la voz y la palabra… La voz humana guarda relación con la
personalidad de cada individuo e incluso con algunos otros datos del hablante”
Pero el trabajo no queda en sólo la voz, sino que se
debe tener en cuenta el timbre, tono y familiaridad de la misma para saber que
es la correcta. Considero que es cansado y hasta rutinario, escuchar a la
“misma voz” grave y seria leer los titulares del día, o aquella voz maternal y
angelical que nos hable acerca de la familia y las mujeres. Estas
características de la voz se han quedado por décadas en nuestra propuesta
radiofónica, y no como algo que puede funcionar hoy en día, sino por
consecuencia de la falta de originalidad para ubicar dichos espacios con voces
diferentes, frescas. Con esto no quiero decir que las voces clásicas y
previamente estudiadas estén incorrectas, sólo considero que en pleno siglo
XXI, una evolución en el perfil de las voces en radio no es una mala idea.
¿Porque no colocar a un locutor con una voz más
fuerte y penetrante, o utilizar la voz de una mujer joven en los espacios
familiares? Muchos considerarían que es una locura, y puede ser cierto. Pero,
¿Qué perdemos intentándolo? La radio necesita seguir, rejuvenecerse y con ella
sus voces.
Si queremos que nuestra propuesta radiofónica sea
exitosa debe ser real, por ende, la voz del programa debe ser real, propia del
tiempo y espacio actual. En esta forma es importante resaltar la credibilidad
de la voz.
Como lo define Julia González Conde en “La
credibilidad de la voz como aspecto persuasivo de creación radiofónica”, la
credibilidad implica:
“En el medio
radiofónico, la credibilidad es fundamental. Las causas son diversas, la
mayoría de los programas son en directo, se hace un seguimiento constante de la
actualidad y los oyentes pueden participar en los programas convirtiéndose
también en protagonistas junto con los locutores, a través del feedback que se
establece entre ellos”
La radio es la voz del locutor, es el comunicador que
consigue que la radio sea un medio cercano porque humaniza las palabras, las
personifica, evoca situaciones, provoca recuerdos y establece lazos emocionales
con el oyente. De ahí la importancia de realizar una buena y correcta locución,
ya que un desconocimiento de estrategias radiofónicas mermaría la eficacia del
acto de la comunicación a través de la radio.
Dejando de lado la voz humana, debemos tomar en
consideración otro recurso importante, el mensaje.
El mensaje radiofónico es la exposición de los
conocimientos que dirigirás a tu audiencia. Se produce gracias a una mediación
técnica y humana, que expresa un contexto narrativo acústico. Según Vicente
Mateos, “el mensaje radiofónico debe cumplir unos principios comunicativos para
que llegue con total eficacia al oyente, tales como: audibilidad de los
sonidos, comprensión de los contenidos, contextualización”
Refiriéndose a la comprensión de los contenidos, se
enlaza mucho hacia la realidad vivida de tus oyentes. La forma en como brindarás
el contenido prevendrá la futura captación del mismo y su próxima aprehensión.
Un mal manejo de información o la mala acentuación en diversa palabras,
provocará que el mensaje se distorsione y malentienda. Así mismo, la
comprensión del mensaje radiofónico permitirá un claro posicionamiento de las
imágenes radiofónicas, evitando la confusión.
La contextualización por su parte ubicará al
radioescucha en el lugar y tiempo exacto en que se desarrollan “los hechos”. Se
refiere a la acción de entregar la información necesaria sobre el tema que se
está hablando a la persona que se encuentra escuchando, esto se logra
entregando más información relevante que sea necesaria y de valor para dar un
contexto al tema, con el fin de que el interlocutor tenga la oportunidad de
entender de mejor manera de lo que se está tratando.
Con respecto a la audibilidad de los sonidos, se puede decir que el sonido es
vital en la radio y la música, es el toque de realidad expuesto en la
propuesta.
Así bien, hablar de la importancia de la música en la
radio como recurso para crear imágenes radiofónicas, resulta algo muy lógico. Y
es que la música tiene un doble sentido. Por un lado decora el mensaje con fondos
musicales para ambientar un relato o una sección, ráfagas musicales para
recalcar un determinado momento de la emisión radiofónica como puede ser un
mensaje publicitario o unos informativos, golpes musicales para llamar la
atención o decorar unas palabras, o canciones para escuchar y descansar del
mensaje radiofónico. Por el otro, enriquece
el significado del mensaje radiofónico. La combinación palabra-música es la esencia
del mensaje radiofónico. Está claro que si leemos un relato en nuestro programa
y éste es por ejemplo, de misterio, hacer que quien lo escuche se sumerja en el
relato será más sencillo con unos fondos musicales coherentes. De igual forma,
si estamos emitiendo un reportaje de un grupo musical y nos acompañan sus temas
musicales esto hará que el programa se enriquezca de contenidos y sea más
atractivo.
A todo ello es importante la creatividad musical. Según
Lucia Frega y Margery Vaughan, en “Creatividad Musical: fundamentos y
estrategias para su desarrollo”, la creatividad musical es:
“La creatividad musical, resultaría de un deseo de
comunicar ideas musicales, apareado con un entorno alentador y receptor de
tales actividades”
Gracias a la creatividad musical, se logra que los
radioescuchas sientan que “viven el momento” generando imágenes radiofónicas en
sus cerebros, provocando la identificación.
En el transcurso de este ensayo, he venido tocando
diversos recursos radiofónicos como: la música, la voz, el mensaje, el lenguaje
radiofónico y la creatividad. Todo esto relacionado nada más y nada menos, que a
la imagen radiofónica.
Es claro decir que si bien, la radio es un medio que
no emite imágenes ni ningún recursos visual, si puede generarlas en su
audiencia. Para lo cual primero definiremos que es una imagen radiofónica. En palabras
de Lidia Camacho Camacho en “La imagen radiofónica”:
“La palabra imagen proviene de la voz latina imago
(representación), relacionado con imitari (imitar). Se trata, en suma, de una representación de la
realidad… En el lenguaje cotidiano, se utiliza el término imagen para referirse
a algo que estimula la vista y que está contenido en una fotografía, en un
cuadro… pero podemos considerar otra acepción en la que la imagen no es un
objeto en sí, sino más bien el resultado del proceso de percepción… ”
La radio crea más imágenes mentales que la televisión
ya que permite la libre creación e imaginación propia. El oyente puede dejar
volar su imaginación y crear espacios inusuales en su mente gracias a la
capación de los estímulos que son emitidos en los programas radiales.
En “La influencia de la percepción de la imagen del
locutor: estudio comparativo entre la voz del locutor aislada o asociada a una
imagen”, Olatz Larrea nos dice que “En definitiva, la capacidad de la radio
como medio creador de imágenes mentales no se pone en duda. Sin embargo son
pocos los estudios experimentales realizados para demostrar este poder y escasa
la literatura recopilada sobre estos procesos de percepción”
Pese a que no se conozca muchos estudios
especializados con respecto a la imagen radiofónica, se sabe que es una
respuesta personalizada y propia. Es en ese punto en donde la radio debe
aprovechar esta oportunidad y generar la aprehensión y participación de los
radioescuchas con respecto al mensaje radiofónico, apoyado en la realidad
social y los objetivos del proyecto.
Así bien, la radio será siempre esa compañera fiel en
nuestro andar del día y en las noches solitarias, será esa pieza familiar
reconocible en nuestra mente, si sólo si, se estudia a fondo nuestra audiencia
y explotamos nuestra creatividad radiofónica. Tal como lo dice Figueroa (1997),
“La radio genera la imagen hablada del mundo”
A MODO DE
CONCLUSIÓN
Por lo expuesto, se podría concluir que la radio es
el medio de comunicación con más apego a la audiencia, no sólo por su accesibilidad
y cotidianidad, sino también por su reflejo de la realidad y su esfuerzo por ser
parte cognitiva del hombre. Que la radio sea capaz de generar más imágenes que
cual otro medio, comprueba que el sonido puede más. Por lo que debemos
continuar desarrollando nuestra creatividad y dando al oyente los recursos
necesarios para hacer volar su imaginación, llevarlo a espacios desconocidos y
a la vez demostrarle su realidad social. Explotar esta característica de la
radio, permitirá más y mejores proyectos radiales, bien encaminados al
desarrollo social.
COLLAGE |
BIBLIOGRAFÍA
CAMACHO CAMACHO, L. (1999) “La imagen radiofónica” McGraw- Hill
Interamericana Editores S.A. Mexico D.F.
ESQUIVIAS SERRANO, M. (2004) “Creatividad: Definiciones, antecedentes
y aportaciones” Revista digital Universitaria N°5. Instituto tecnológico y de
estudios superiores de Monterrey
FREGA, A. & VAUGHAN, M. (2001) “Creatividad Musical: fundamentos
y estrategias para su desarrollo” Argentina.
GONZÁLES, A. “El proceso
creativo de la elaboración: La Radio como soporte de publicidad”
GONZÁLEZ CONDE, M. “La credibilidad de la voz como aspecto persuasivo
de creación radiofónica” Revista de comunicación y nuevas tecnologías N°6.
Icono 14
MURELAGA IBARRA. “La audiencia de la radio. De los oyentes a los
usuarios”
OLATZ LARREA, E. (2008) “La influencia de la percepción de la imagen
del locutor: estudio comparativo entre la voz del locutor aislada o asociada a
una imagen” Departamento de comunicación. Universitat Pompeu Fabra
REZZA, S. (2009) “El mundo es sonoro”
RODERO, E. (2005) “Recuperar la creatividad radiofónica” Facultad de
comunicación de la Universidad Pontificia de Salamanca
RODERO, E. “¿Veo cuando oigo? Recursos sonoros para estimular la
creación de imágenes mentales en el oyente” Lecciones del portal. Portal
comunicación.com
Ambar,
ResponderEliminarHay notorios avances en tus itinerarios significativos, tanto en lo discursivo como en lo componencial.
Tus materiales de asistencia aportan lo que deben.